Gaceta 22 No. 177
del 19 de diciembre del 2022 al 1 de enero del 2023
Imaginemos que, en una futura misión en la Luna, un grupo de astronautas encontrara un monolito fabricado con un desconocido material, el cual, en el momento de entrar en contacto con los rayos del Sol emitiera una señal de ondas sonoras con destino a Saturno y después de eso “se apagara”. Si esto sucediera, daríamos respuesta a una de las preguntas más inquietantes de todos los tiempos: no estamos solos en el Universo y no somos las únicas creaturas inteligentes en él. Esto que no ha sucedido en la realidad, es el argumento de un cuento publicado por el científico y escritor británico Arthur C. Clarke en 1951, Centinela de la eternidad, y es ni más ni menos que el relato que inspiró la famosísima 2001: Odisea del espacio; sí, la tremenda película de Stanley Kubrick, pero también la novela homónima de Clarke.