Por: Arody Rangel

El cuerpo del delito: Novela negra

En todo lo que se puede llamar arte hay algo de redentor. Puede que sea tragedia pura, si se trata de una tragedia elevada, y puede que sea piedad e ironía, y puede ser la ronca carcajada de un hombre fuerte. Pero por estas calles bajas tiene que caminar el hombre que no es bajo él mismo, que no está comprometido ni asustado. El detective de esa clase de relatos tiene que ser un hombre así. Es el protagonista, lo es todo.

El simple arte de matar, Raymond Chandler

Literatura de ficción, de no-ficción, relato policial, novela criminal, novela de misterio o relato detectivesco son algunos de los apelativos con los que se conoce a la novela negra. Ésta no se deja atrapar del todo por las clasificaciones, como el cuerpo del delito, evade cada resolución, cada fórmula.

Surgió en la década de 1920, se presume que es el reflejo de la decadencia social, de los bajos fondos estadounidenses asolados por la Gran Depresión. Las fuentes concuerdan en señalar que la trama de este tipo de relatos gira alrededor de un asesinato, pero que no se agota en el esclarecimiento del crimen. Dicen, además, que se diferencia de las novelas policiacas de finales del XIX, pues en el género noir el detective suele ser un hombre arruinado, algo como un antihéroe: un tipo duro, poco impresionable y con un agrio sentido del humor, un hombre situado al margen de la legalidad. Los testimonios destacan que en ella el uso del lenguaje es coloquial, que predomina el slang* y la jerga del barrio y los suburbios.

Se dice también que debe su nombre a las atmósferas y escenarios sórdidos en los que suceden los hechos. Que en ella nos encontramos ante el acertijo que dibujan las huellas del crimen y el autor nos ofrece la encrucijada de los caracteres de los personajes; no hay buenos ni malos, tampoco un desenlace feliz, sólo el realismo que fotografía desde la perspectiva del detective -y algunas veces desde la del criminal- una cotidianidad en la que la violencia, el delito, la corrupción y la impunidad son la norma.

Aunque no podemos reducir sin más la novela negra al género policiaco, hay que buscar sus orígenes en Edgar Allan Poe, el padre del género (un premio con su nombre es otorgado cada año en Estados Unidos a los mejores autores de misterio). Y, por qué no, visitar a algunos clásicos: Chesterton y el protagonista de decenas de sus relatos, el cura y detective Brown; Conan Doyle, creador del detective más famoso de todos los tiempos: Sherlock Holmes; las novelas enigma de Agatha Christie, la dama del crimen; y los relatos de Patricia Highsmith, verdadera maestra de la psicología oscura del ser humano.

En pocos años, la novela negra pasó de Estados Unidos a Europa y es un género que se escribe aún en nuestros días, de modo que las historias propias de este género se cuentan en cientos. La mejor manera de iniciarse en el noir es con los relatos de los padres fundadores: Carroll John Daly dio vida al detective prototipo del género, Race Williams, protagonista del puñado de obras que hicieron escuela. Tras sus pasos se encuentran las dos cumbres de la novela negra: Dashiell Hammett y Raymond Chandler; la novela más famosa de Hammett es El halcón maltés, cuya adaptación cinematográfica a cargo de John Huston es uno de los clásicos del cine negro con Humphrey Bogart como el detective privado Sam Spade; algunos de los relatos de Hammett se han compilado con el título El detective de la Continental. Por su parte, Chandler es creador del antihéroe consumado del género: Philip Marlowe, estelar de historias como Playback, El largo adiós, El sueño eterno o La dama del lago, e inmortalizado por las actuaciones de Humphrey Bogart (El sueño eterno, dir. Howard Hawks, 1946) y Robert Montgomery (La dama del lago, dir. Robert Montgomery, 1947).

Hay quienes apuestan a que la novela negra es la novela social de nuestra época, lo cierto es que, sin ánimos de moralizar o sermonear, el noir nos lleva delante del lado oscuro del ser humano y, en algún sentido, de nosotros mismos.

Si eres fan del género o deseas iniciarte, no te pierdas del Tercer Festival Internacional de Novela Negra: Huellas del Crimen, la cita es en el Centro de las Artes de San Luis Potosí, del 6 al 9 de septiembre. Este evento logra reunir a algunos de los mayores exponentes del género y en esta edición, la temática del festival girará en torno al perfil psicológico y el diagnóstico psiquiátrico de los criminales.

*Slang: Lenguaje coloquial del idioma inglés.