Por: Everth Bolaños

La sociedad de los poetas muertos

La primera vez que vi La sociedad de los poetas muertos fue mientras estaba en la preparatoria, gracias a una maestra poco ordinaria (en el mejor sentido de la palabra) y bastante “Keatoniana”, quien, justamente intentaba revolucionar nuestra forma de pensar a los 16 años, edad en la que, creo yo, es una gran etapa para plantar una semilla en la mente de un ser humano.

La película, una de mis favoritas, estrenada en 1989, le dio la oportunidad a Robin William de interpretar uno de los papeles más entrañables que haya llevado a escena: el profesor John Keating, mejor conocido como Mi capitán.

Ahora bien, si aún no has visto la cinta, te cuento de qué va. A finales de la década de los 50, llega un profesor poco ortodoxo a una escuela llena de reglas, en la que busca cambiar la forma de pensar de sus alumnos, con la intención de que persigan lo que quieren y recuerden que sólo se tiene el hoy, de ahí la famosa frase latina que se convierte en el estandarte de esta historia: Carpe diem. Pero, como te imaginarás, no será tarea fácil, ya que la tradición intentará imponerse en todo momento.

Y es que, qué importante es el papel que desempeña un buen maestro a lo largo de nuestras vidas, uno de ésos que saben sacudirte y te llevan a hacerte las preguntas que, de otro modo, jamás te hubieras planteado.

Debido a lo anterior, cuando me enteré que se haría una adaptación del largometraje al teatro fui la más feliz. Me llenó de curiosidad todo, desde cómo sería la escenografía, hasta quiénes tendrían la gran responsabilidad de darle vida a cada uno de los personajes de este guion ganador del Óscar.

Luego de verla te puedo decir que no te debes de perder esta puesta en escena llena de magia y mensajes que te invitan a reflexionar acerca de tu pasión por la vida y por aquello que te motiva a continuar, ya que, sin lugar a duda, las actuaciones de estos jóvenes te cautivarán, sin olvidar el extraordinario trabajo que hace Alfonso Herrera, quien en todo momento se apropia del gran John Keating.

Dirigida por Francisco Franco y protagonizada por Alfonso Herrera, Luis Couturier, Sebastián Aguirre, Germán Bracco, Alejandro de Hoyos, Alejandro Puente, Mauro Sánchez y Paco Rueda, la obra estará en cartelera hasta el 31 de mayo, de jueves a domingo en el Nuevo Teatro Libanés.